Prólogo de bluenote

En un camarote oscuro, tan solo iluminado por la tenue luz de una vela de aceite sobre un amplio escritorio, un corpulento y misterioso hombre escribe concentrado lo que parece ser una carta.

-Y por la consiguiente, se reclama la presencia permanente de alguno de sus prometedores reclutas, para permanecer bajo mi atenta tutela y para ejercer de ayudante durante su…-

------------------------

11 de mayo; en mitad de las aguas del West blue un gigantesco buque de la marina se levanta poderosamente mostrando su estandarte con orgullo y honor, sin retroceder un solo milímetro pese al hecho de que en ese mismo instante estaban siendo abordados por la infame plaga que inunda los mares de aquella época…piratas. Dos grandes galeones pirata disparaban y encañonaban el colosal buque mientras arrojaban cuerdas para que sus tripulantes asaltasen el barco enemigo. Los marines, que se veían superados en número, corrían de un lado a otro, cortando cuantas cuerdas podían y reteniendo a los piratas que más conseguían profundizar en la cubierta del buque.

- ¡¡Son los hermanos Tim Y Sherry!! Maldita sea ¡Estamos perdidos!- Gritaban los marines viendo su derrota cada vez más cerca. Cada segundo que pasaba significaban varias bajas del bando de la marina que no se podia permitir un solo instante de descanso.

Los hermanos Tim y Sherry, conocidos piratas que entre ambos sumaban 42.000.000 Berries. Tim era un hombre alto y excesivamente delgado, siempre vestido con su camisa blanca y pantalones ajustados oscuros. Tenia la cara llena de cicatrices, signo de sus violentas guerras y matanzas junto a su hermano. Este peligroso individuo iba armado con su espada llamada “Hélice”, una larguísimo espada que podia hacer que su parte superior girara a gran velocidad sobre si misma, volviéndose una circunferencia altamente cortante y peligrosa…la cabeza de este tío había alcanzado los 12.000.000 millones, lo que daba entender que su hermano era el más peligroso de los dos. El otro pirata, Sherry, conocido como Sherry “La Bestia Ártica”, era un tipo más bien bajito, que no media más de 1’5 metros y poseía un frondoso pelo blanco. Sus ropas eran casi todo corazas de aspecto caro, conseguidas a base de robar los cruceros de lujo…nunca dejaba supervivientes. La base de la fuerza de este tipejo era el hecho de que había ingerido la Kuma kuma no mi, modelo oso polar, la cual le transformaba en un monstruo de poder increíble con una recompensa de 30.000.000 millones. Cada uno de estos tipos capitaneaba uno de los barcos y juntos formaban la Flota Thimerry, temida en todo West Blue.

El silencio se hizo en todo el buque cuando ambos piratas abordaron el barco. Ambos hermanos, juntos, observaban desde sus distintas perspectivas a los marines que tenían frente a ellos, todos temblorosos y temerosos por sus vidas.

- Sherry-sama…parece que aquí solo hay pedazos de mierda… ¿No es así Sherry-sama? - Preguntaba Tim encorvando la cabeza de forma exagerada, una acción bastante común cuando le preguntaba algo a su hermano.

- Si…- Pronunció Sherry sin inmutarse, con los brazos cruzados.- Bien, lo acabo de decidir…me quedaré con este barco…Todos los marines tendrán que saltar por la borda si no quieren ser castigados y después decapitados…¡¡Es una orden!!- Terminó por gritar Sherry descruzando los brazos y apretando los puños de forma intimidatorio.

Los marines dudaban lo que tenían que hacer en ese mismo momento, sabían perfectamente que ninguno de ellos era suficientemente fuerte como para enfrentarse abiertamente a los hermanos, y si lo intentaban en masa serian igualmente masacrados. Una pila de cadáveres marines ya yacía en el suelo cerca de donde los hermanos se encontraban y cualquier acto descuidado por parte de cualquiera de los reclutas allí presenten seria una invitación formal a formar parte de tan sanguinaria escena.

En ese instante, uno de los marines más que se encontraba a dos pasos de la puerta que llevaba al interior del buque se aproximo a ésta con cautela y entró sin ser visto. Una vez dentro respiró profundamente…Ese hombre podía hacerlo…Él era la única persona de todos ellos que podía plantarle cara a esos rufianes y el joven y aventurero marine lo sabia, de manera que se apresuró hacia al despacho donde se encontraba su superior, el Capitán Bluenote.

------------------------

De nuevo nos encontramos en el interior del camarote, minutos antes de la masacre producida en cubierta del Buque de la marina. La oscuridad se mantenía permanentemente en aquel lugar, pero una inesperada brisa hacia que la tenue llama de la vela bailara estrepitosamente amenazando con apagarse. No obstante aquel hombre no se inmutaba y proseguía con su escritura.

- …periodo de prueba, yo me haré cargo de todo lo necesario en su instrucción, así como lo necesario para su entrenamiento físico y mental. Como dije anteriormente, agradecería que la calidad y motivación de este nuevo recluta exceda con creces a las de sus sucesores, ya que estos resultaron ser bastante decepcionantes.

Atentamente: Capitán Bluenote-

Fue en ese instante en el que Bluenote se percató en todo el alboroto que reinaba fuera y miró hacia la puerta extrañado, ya que pudo notar como la manilla de ésta empezaba a girar. En un abrir y cerrar de ojos, un marine, muy exaltado, entró en el camarote, jadeando como un poseso y se arrodillo delante de Bluenote, el cual ni si quiera se levantó de la silla.

- Levántate recluta… ¿Qué quieres? – La seria y fría voz de Bluenote caló en los huesos del recluto al que le entraron ganas de ponerse a llorar allí mismo.

-N...Nos…Nos abordan..Sherry...y el otro, su hermano…Tim…Por favor Capitán, deténgalos…- Dijo tartamudeando el marine, que agachó la cabeza mientras se levantaba con dificultad, intentando esconder sus lagrimas de su superior que le miraba de forma seria y penetrante. Bluenote dejo la pluma con la que estaba escribiendo sobre la mesa, al lado de la carta, ya terminada, firmada y metida dentro de un sobre sellado.

-Has hecho bien en decírmelo muchacho.- Dijo Bluenote mientras se levantaba de su asiento y se dirigía hacia el marine con seguridad. –Ahora quédate aquí…No me gusta luchar al lado de un cobarde que deja el campo de batalla…- Dijo mientras caminaba, pasando por el lado del marine y sin siquiera mirarlo, lo dejo atrás, cerrando la puerta detrás suyo y dejándolo allí encerrado.

Bluenote recorrió el camino con decisión y seguridad, conocía a esos dos piratas; eran dos escurridizos bribones que se encargaban de atracar a los marines más débiles e indefensos, a la vez que rehuían de los altos cargos de la marina. Sin duda, el hecho de que acabasen en el buque del que estaba a cargo Bluenote significaba que no eran conocedores de su presencia allí…fuera como fuera esos dos mal nacidos estaban a punto de llevarse una grata sorpresa.

------------------------

Con el típico rechinar de una puerta a la que le falta una mano de aceite, la puerta que llevaba al interior del buque se abrió lentamente. De su interior salio nada más u nada menos que el Capitán Bluenote, bajo la atenta mirada y sorprendida mirada de todos los piratas que allí se encontraban y que significaba un atisbo de salvación para los marines que ya veían peligrar su vida de forma irremediable.

Bluenote busco con su mirada a los dos hermanos, hasta finalmente encontrarlos a su derecha, junto a una montón de cadáveres de marines que habían dado sus vidas por la justicia…una muerte digna…pero muestra de la debilidad que correría los cargos más bajos de la marina y de la cual Bluenote era consciente. Los ojos de Bluenote mostraban una seriedad e impasibilidad que sobrecogieron incluso al mismísimo Sherry

- Capitán Bluenote ¿No es cierto?... he oído muchas cosas de usted…Es sin duda un oponente a tener en cuenta…pero me temo que no se encuentra en una posición muy favorable…Es decir, tenemos infinidad de rehenes aquí- Dijo sonriendo. Rápidamente, agachándose, cogió a un marine moribundo y se lo pasó a su hermano con gran velocidad. A su vez, Tim puso el filo de su espada en contacto con el cuello del marine, de manera que Bluenote no pudiera hacer nada. – Si no quiere que su tropa resulte más herida, haga el favor de abandonar el barco saltando por la borda junto a sus subordinados…- Termino por decir Sherry con una sonrisa que transmitía pura maldad.

Bluenote continuaba mirando con seriedad a los hermanos piratas, que le devolvían una miraba que se podría considerar muy burlona y desafiante. Tras esto, Bluenote cogió el fusil que sostenía en sus manos el marine que tenía a su izquierda y tras apuntar hacia los hermanos terminó disparando tres veces sobre el marine que ejercía de rehén. Las balas atravesaron y mataron al marine en el acto, pero también alcanzaron a Tim, que rápidamente lo soltó con una cara de gran asombró y retrocedió, con las balas incrustadas en su cuerpo y sangrando sin parar por su boca.

- ¿Pero qué…?- Dijo absolutamente sorprendido Sherry al ver a su hermano caer al suelo desangrándose. – ¿Cómo te atreves a hacer eso, pedazo de basura? ¡¡Te matare!!- Gritó Sherry, transformándose en el terrible hombre-Oso polar y lanzándose contra Bluenote totalmente histérico.

La gigantesca figura del oso polar híbrido podía superar fácilmente los 4 metros de altura, no obstante, se movía a una velocidad muy superior a la de un humano normal y arrollaba a todos los marines e incluso piratas que se le interponían por delante. En un abrir y cerrar de ojos, el gigantesco monstruo apareció frente a Bluenote, el cual aun no había soltado el fusil y levantó una de sus gigantescas garras para aplastar la cabeza del marine, el cual miraba a aquella bestia indiferentemente, pero con frialdad.

- ¡¡No puedes escaparte de mi!!- Gritó Sherry abrumadoramente encolerizado.

- Eso es inútil…- Dijo Bluenote- Ni te molestes…- Continuó.

La poderosa garra de Sherry golpeó con tanta fuerza a la posición donde se encontraba Bluenote que el suelo de madera se levanto, a la par que una tremenda explosión asoló la cubierta del buque, el cual tembló por completo. Muchos marines salieron volando, al igual que los piratas que observaban totalmente horrorizados la escena.

Pero cuando la nube de humo se disipó, la imagen que se pudo observar desconcertó a todos los presentes. Bluenote ni siquiera se había movido, mientras que la garra de Sherry se encontraba clavada en el suelo bajo sus pies. Los ojos de Sherry se desorbitaron de furia y sorpresa.

- No puede ser… ¡Estoy seguro de que te había golpeado!- Se quejo Sherry al ver sus planes de acabar con el marine de un golpe totalmente frustrados.

Bluenote le miro a los ojos mientras tocaba el pecho del gigantesco hombre-oso que aun no se había movido por la sorpresa. En ese momento, como por arte de magia, la mano comenzó a introducirse dentro de Sherry sin dañar su piel en absoluto. Los ojos de Sherry denotaron un terror tan tremendo que ni siquiera le salía la voz.

- Al igual que tu…Comí una akuma no mi… No me pararé en detalles, no te diré ni su nombre ni sus efectos…Pero una cosa tienes que saber… La gentuza como tú, no puede ni siquiera tocarme.- Tras las palabras de Bluenote, Sherry notó como si una tremenda presión le aplastara el corazón con gran fuerza y empezó a sangrar por todos los orificios de su cara. Perdió tanta fuerza que su transformación se replegó y volvió a ser un simple humano.

-¡¡¡Deja en paz a mi hermano!!!- Tim se había levantado y corría hacia Bluenote, aunque su cuerpo estaba herido, haciendo girar su espada a gran velocidad con al intención de cortar a Bluenote.

Bluenote sonrió.

- Perdiste toda oportunidad al gritar…despreciable imbécil…- Masculló Bluenote, mientras cerraba los ojos confiado.

El corte de la espada de Tim paso a través de Bluenote sin dañarlo, pero cortando la cabeza de Sherry que se encontraba muy cerca del marine. Tim se alejó de Bluenote y se arrodillo al darse cuenta de lo que había hecho. Ambos capitanes pirata estaban acabados…Uno muerto y el otro lo suficientemente herido y hundido en la miseria que apenas podría moverse; no obstante en aquel barco había otros 200 piratas que merecían ser castigados.

Bluenote sacó la mano del interior de Sherry y se giró hacia los otros piratas que le miraban con ojos llenos de terror y pánico.
-¡Escuchadme piratas, habéis elegido una senda en vuestra vida que solo puede desembocar en un destino…y ese destino es un muerte lenta y dolorosa para todos vosotros, maldita basura! … EMPTY WORLD…- Dijo finalmente el marine mientras extendía sus brazos en ambas direcciones mientras abría las palmas de sus manos de par en par.

------------------------

[30 minutos después]


Los marines empezaban a apilar los cuerpos de los piratas que habían sido asesinados, aunque increíblemente sus cuerpos no parecían haber sufrido daño alguno. Otros marines limpiaban manchas de sangre de la cubierta mientras los últimos escoltaban y trataban a los heridos lo mejor que podían. Había sido una cruenta batalla, pero la intervención del Capitán Bluenote les había dado la victoria.

Los marines, mientras, comentaban sobre lo sucedido y elogiaban las grandes habilidades de su superior, pero a la vez temían profundamente sus ideales y su forma de ver la vida marine.

------------------------

De nuevo en la parte interior del barco, en el camarote del capitán Bluenote, éste se encontraba hablando con su primer oficial de temas importantes.

- De nuevo le agradezco el que halla puesto fin a nuestra trifulca con esos piratas, señor…- Dijo el oficial con un gran respeto en su tono de voz.

- No hay nada que agradecer…es vuestro trabajo al fin y al cabo, aunque para mi es más que eso…es mi vida, el legado que me dejó mi padre y que yo sigo sin rechistar…- Dijo el capitán poniéndose momentáneamente melancólico, pero rectificando su conducta un segundo después. – Cambiando de tema, necesito que envíes esta carta a Mariejoa, ¿Entendido? Es urgente- Finalizó el capitán.

- ¡Si, señor!- Afirmo el oficial, y con el saludo típico de la marina, el oficial se retiró del despacho y cerró la puerta tras de si.

El capitán se quedo allí solo, mirando una pared llena de carteles de se busca, en la cual estaban los de Tim y Sharry, ahora tachados. Busco algo en su bolsillo y sacó un cigarrillo, que inmediatamente encendió con el mechero que tenia sobre la mesa. Se quedo pensando…

- Espero que el siguiente valga la pena…- Pensó para su adentros.